Sin embargo, el inmovilismo lleva al desastre. Quien se para, no reanuda el camino y con ello está el fin.
El mensaje de cara a este 2014 debe ser de esperanza en el sentido de que las cosas deben empezar a cambiar. Tenemos datos de AFEB y AECOC, que nos muestran una ligera recuperación ce las ventas en el tercer trimestre del año. No es que sea importante, pero sí es significativo, porque por fin vemos un dato mínimamente positivo.
Esperemos que eso signo sea real y que en los primeros meses del año se experimenten cambios, aunque sean de forma delicada. Hay que empezar a cambiar las tendencias y el cambio empieza en uno mismo, con una actitud positiva ante los acontecimientos.
Queridos amigos y todos los demás, felices fiestas y un 2014 lleno de esperanza.